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El mercado de la logística y el transporte: retos para 2025
En el evento "La logística en el centro de la transición de la demanda", organizado el pasado mes de noviembre por el Observatorio de la Logística de Contratos "Gino Marchet" del Politécnico de Milán, se presentaron los resultados de la investigación de 2024 sobre el mercado de la logística y el transporte.
El año 2024 se confirmó como un año de estabilidad, en línea con 2023, debido a la ralentización de la actividad económica e industrial, tras el auge del bienio 2021-2022, que había registrado un crecimiento de dos dígitos impulsado por la postpandemia, con una recuperación en todos los sectores industriales y comerciales, gracias también a la importación-exportación y a la popularización del comercio electrónico.
En 2024 también se produjeron importantes aumentos de los costes laborales, los alquileres y el coste del dinero, lo que frenó las inversiones y llevó a muchas empresas a cuestionar sus estrategias de inversión y a centrarse en la «cautela».
Hacia la sostenibilidad
2024 fue también el año del "giro estratégico" hacia la sostenibilidad económica, medioambiental y social. Para algunas grandes empresas que cotizan en bolsa, pasó a ser obligatorio elaborar un informe de sostenibilidad, y esta obligación se extenderá gradualmente a las empresas que no cotizan en 2026.
Si bien la puesta en marcha de esta "transición verde" está generando una ralentización en el ámbito productivo, la investigación del Observatorio ha puesto de manifiesto que las empresas que ya han adoptado soluciones encaminadas a mejorar la sostenibilidad medioambiental también están aportando importantes beneficios en el rendimiento operativo, lo que se traduce en una recuperación de los márgenes y, por tanto, de las inversiones.
Para las empresas, elegir la "tecnología adecuada" no es fácil, porque todo está aún en fase de "experimentación" y no hay soluciones "maduras". A largo plazo, no hay resultados concretos, por lo que no es fácil decidir hacia dónde dirigir las inversiones.
En la mayoría de los casos, las empresas tienden a "diversificar" y adoptar una estrategia «multitecnológica» para mantener abiertas más opciones y probar qué soluciones aportan los mejores resultados.
Además, la transición ecológica no solo consiste en reducir las emisiones de CO2, sino que también incluye maximizar el uso de los recursos, así como promover la reutilización, el reciclaje y la eliminación para la recuperación, introduciendo así el paradigma de la economía circular.
Cómo redefinir el papel de la logística
En este contexto, la cadena de suministro exige una capacidad de planificación de la gestión de los flujos de mercancías y factores de producción, lo que requiere nuevas competencias y una visión mucho más amplia del flujo lineal proveedor-producción-distribución.
Sincronizar los flujos de salida de productos acabados, recuperar residuos o embalajes, reenvasar productos o remanufacturar maquinaria para hacerla productiva en un nuevo ciclo de vida son solo algunos ejemplos de "servicios de valor añadido" que los profesionales de la logística pueden ofrecer a sus clientes para ayudarles a ser más sostenibles.
Quienes se dedican hoy a la logística ya no solo tienen que "reducir los residuos", sino que deben saber regenerar y reconvertir los recursos utilizados o recuperados para generar nuevos márgenes.
Si los modelos de negocio cambian, la logística también debe hacerlo y la mejor estrategia probablemente sea "diversificar" servicios y tecnologías.
¿Cuál será el papel de la tecnología?
En el transporte, la logística y las fábricas, la tecnología desempeña un papel fundamental, ya que puede apoyar de forma concreta los objetivos que se quieren alcanzar, recuperando no solo la eficiencia productiva, sino también la sostenibilidad social y medioambiental.
Incluso las empresas más reacias a invertir en esta dirección, sin "obligación legal", tendrán que tomar conciencia de que es el mercado, es decir, los propios clientes, los que impondrán la transición, por lo que merece la pena adaptarse si no se quiere perder competitividad.
En el futuro, la tecnología no solo tendrá que ser "de apoyo", sino que, gracias también a la inteligencia artificial, habrá que aportar soluciones proactivas que sugieran los mejores pasos a seguir.
Los incentivos y los recursos no faltan:
“Sé tú el cambio que quieres ver en el mundo” Mahatma Gandhi
A diferencia de la primera revolución industrial, la máquina tendrá que estar "al servicio del hombre", es decir, la eficacia y la productividad se medirán también por su capacidad para reducir la fatiga y el aburrimiento del trabajo humano.
En 2025, el PNRR también destinará nuevos recursos a apoyar a las empresas del sector de la logística y el transporte que quieran afrontar la transición digital y apoyar estrategias «centradas en el ser humano», capaces de aportar valor añadido en términos de eficiencia, productividad, atractivo y sostenibilidad medioambiental y social.
En 2025, Replica Sistemi - Zucchetti es socio del Observatorio Contract Logistics para apoyar la investigación y conocer las principales tendencias del mercado de la logística y el transporte.
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